En el año 1901 el inmueble obtuvo el primer premio del Concurso Anual de Edificios Artísticos que concedía el Ayuntamiento de Barcelona que, además de la estética, premiaba la funcionalidad del edificio y la calidad de su construcción, en este caso destacando el trabajo de la piedra.
El Mercantil fue absorbido en 1917 por el Banco de Barcelona, en un proceso que duró casi dos años. Ya en 1920 el Banco de Barcelona, el primer banco privado español, quebró provocando enormes pérdidas a accionistas y clientes.
Hacia 1930, el edificio fue adquirido por la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de Barcelona y se llevaron a cabo reformas en su interior que no alteraron los elementos más destacados. Afortunadamente, el edificio no tuvo que lamentar daños significativos durante la Guerra Civil (1936-1939), a pesar de encontrarse ubicado en un barrio duramente castigado por la Aviazione Legionaria italiana.
En los años 70 el Departamento de Trabajo de la Generalitat de Cataluña instauró su sede en el edificio hasta 1997, momento en el que se estableció la Escuela de Diseño Elisava que permaneció en el inmueble hasta el año 2010. Durante este periodo, en el año 1986, Grup Núñez i Navarro adquirió el edificio de la calle Ample, 11 y el de al lado (calle Ample, 13) uniéndolos en su interior.
Entre 2016 y 2019 el equipo técnico de Grup Núñez i Navarro, en colaboración con despachos de arquitectura externos, llevamos a cabo en ambos edificios obras de rehabilitación y adaptación de los espacios para su nuevo uso como viviendas y locales comerciales.
Comparando los planos originales del edificio con los actuales, podemos percibir que ni la fachada ni la estructura han sufrido cambios. Hoy en día está catalogado como Bien Cultural de Interés Local.