La imagen
que nos define
La evolución de nuestra marca
La marca Grup Núñez i Navarro define nuestra identidad, vocación familiar y la evolución de la compañía en estos 75 años de experiencia.
Todo cambia con el tiempo. No solo nuestra marca, diversificando activos, también la imagen adaptándose a los nuevos tiempos. Pero hay algo que nunca ha cambiado: las dos N con las que se nos identifica, que llevan con nosotros desde los inicios de nuestra andadura y que representa la familia y la familiaridad. Estas dos N nos definen y nos hacen sentir parte de una compañía con años de trayectoria, experiencia y saber hacer.
Nuestro primer logotipo ya nos identificaba con dos N mayúsculas, extraídas de los apellidos de los fundadores que le dieron nombre, Josep Lluís Núñez Clemente y Maria Lluïsa Navarro, su esposa.
El vínculo de los fundadores tomó más fuerza en esta segunda versión, en el que los apellidos Núñez y Navarro se incorporaron en la imagen gráfica de la empresa y se introdujo el naranja como color corporativo.
En la década de los 70 se realizó una síntesis de lo que transmitían los dos logotipos anteriores, definiendo definitivamente las dos N como imagen de la compañía. El hecho de que una N esté encima de la otra representa la actividad que se desarrollaba: la construcción de edificios.
Las dos N se situaron de nuevo una al lado de la otra, esta vez enmarcadas dentro de un círculo para dotar al logotipo de estabilidad en la composición y que nos acompañará en las décadas posteriores.
La imagen gráfica mantiene el círculo con las dos N, pero las sitúa a alturas distintas y con distintos colores.
Se trata de un rediseño del anterior logotipo, que comparte la misma composición, pero cambia la disposición de las dos N.
La marca en la actualidad
Coincidiendo con el 75 aniversario hemos rediseñado nuestro logotipo manteniendo su esencia. La tipografía, elegante y sobria, ahora es más estilizada y el icono con las dos N, enmarcado por un círculo, sigue presente. También cuenta con una sutil evolución de los colores corporativos, dotando a la imagen gráfica, en su conjunto, de distinción.
Además, la marca se divide en cinco líneas de negocio, cada una con su propia identidad visual.