@stoptheroc: “Me doy por satisfecho si a través de mi fotografía, consigo que la gente se fije más en la ciudad en que vivimos”

145.000 followers conseguidos con apenas 725 fotos. Desde que publicó la primera imagen, allá por 2012, ha ganado una media de 200 seguidores por foto, y el engagement de cada publicación (suma de likes, comentarios y comparticiones) se cuenta por millares. Nada mal para un perfil centrado en la arquitectura. Esos son algunos de los registros que ofrece Roc Isern a través de su cuenta principal en Instagram,@stoptheroc . Cuenta además con otro perfil especializado en fachadas llamado @barcelonafacades, en el que acumula más de 60.000 seguidores. El secreto de su éxito es una combinación perfecta de paciencia para realizar una foto en el momento oportuno, aún a riesgo de tener algún encuentro no deseado con diferentes fuerzas del orden, y una sana predilección por la simetría y la iluminación idónea como elementos fundamentales para conseguir una foto 10. Basta ver una foto suya para entender la conexión existente entre arquitectura y fotografía de la cual nos contó no hace mucho Adrià Goula. Con todos estos ingredientes, charlar un rato sobre estas dos disciplinas era un must para nosotros.

¿Cómo comenzó tu carrera como fotógrafo?

Aún no he llegado a considerar mi relación con la fotografía como carrera. De hecho hace menos de un año que he empezado a realizar encargos como fotógrafo. Mi formación académica está relacionada con la arquitectura, estudié arquitectura técnica y toda mi carrera profesional hasta el momento ha sido dedicada a la arquitectura y más concretamente a la dirección de obras.

¿Y en qué momento nace la fotografía de manera profesional?

No creo que haya habido un momento. Ha sido una evolución. Desde siempre me ha gustado la fotografía, pero nunca me había dedicado exclusivamente a fotografía de arquitectura. Es cierto que antes de la existencia de Instagram, mi fotografía podía considerarse más convencional. Aprovechaba mis vacaciones y viajes para fotografiar un poco de todo. Pero sí es verdad que desde siempre he tenido predilección por visitar ciudades y obras de arquitectos que conocía.

¿Por qué elegiste Barcelona como uno de los escenarios para hacer tus fotografías?

Es la ciudad donde he nacido y he vivido siempre. Cuando tuve mi hija hace 6 años, coincidió más o menos con el tiempo en que empecé mi cuenta de Instagram. A mi pareja y a mí siempre nos había gustado viajar y lo hacíamos siempre que podíamos, pero en esos momentos evidentemente la prioridad era otra así que aproveché para plantearme el hecho de salir por Barcelona, una ciudad muy bien considerada por su arquitectura, a fotografiar cosas que pocas veces en mi vida había hecho. Y así crear contenido para satisfacer mis ansias iniciales de publicar en Instagram.

¿Tuviste que superar obstáculos para que tu trabajo fuera aceptado por tratarse de fachadas, construcciones y figuras geométricas?

No, al contrario. Desde un inicio siempre he tenido un feedback muy bueno. Creo que influyó también el hecho de que a la comunidad que nos gusta la arquitectura, en Instagram siempre ha sido muy fiel y especialmente amable en sus comentarios.

¿Qué es lo que buscas en el momento de hacer una fotografía?

Para que un sitio me atraiga, el factor principal es que haya una buena luz e iluminación, pero me gustan los espacios grandes, libres de interferencias, que estén limpios o que no haya cosas que rompan la geometría del espacio. Yo me daré por satisfecho el día que a la gente que vea mis fotografías le entren ganas de ver aquello o que, simplemente, gracias a las fotos de las fachadas la gente vaya caminando se fije, levante la cabeza y aprecie lo que nos rodea.

¿Por qué decidiste separar las cuentas @stoptheroc y @barcelonafacades?

Porque hubo momentos en que tenía muchas fachadas y no quería saturar mi cuenta principal. Entonces, pensé que el título y la idea de ir poniendo cromos y texturas tenían suficiente potencial como para tener un perfil propio. Cuando empecé Instagram tampoco dominaba mucho la técnica, iba improvisando.

¿Y ahora, cuál podrías decir que es tu técnica y tu ritual?

Las fachadas no tienen demasiado secreto porque es algo que está ahí, fijo. Durante el día, buscar la mejor iluminación. A mí me gusta que haya una iluminación directa del sol, porque crea sombras que hacen que se vea más información de la imagen. Buscar la mejor hora. Tomar una posición totalmente centrada y tomarla con un objetivo gran angular.

¿Utilizas también el móvil para hacer algunas fotos?

No. Pero la postproducción sí; Con la tablet. Me gusta hacerlo todo en el entorno móvil.

¿Cuál es tu factor diferencial respecto a otros fotógrafos?

No creo que tenga un factor diferencial, porque la gente hace cosas muy buenas. Hay mucho talento. Pero quizá me caracteriza ser muy perfeccionista en los encuadres, en que las líneas sean paralelas, que la foto entre por los ojos y no veas aquel horizonte caído. Cuando veo una fotografía o la tengo en mente, espero en el sitio lo que haga falta para conseguirla, para completar la idea que me he hecho. Espero que suceda algo o que pase alguien. Me gusta ese tipo de espontaneidad.

¿Es difícil buscar el ángulo exacto para tener una buena foto? ¿Qué es lo más extraño o arriesgado que has hecho para conseguirla?

No es que sea difícil pero cuanto más experiencia mucho mejor para intuir cuáles son los ángulos más fotogénicos que son también los que acaban definiendo tu estilo de fotografía.

Por ejemplo yo tengo 3 ángulos muy característicos que son: Las tomas frontales (una fachada por ejemplo), desde un punto central e intentado crear una simetría. Una perspectiva donde hay un punto de fija en el centro, destacando las líneas que convergen en un punto, también buscando la simetría. Y también otra simetría igual pero mirando hacia arriba (look up) por ejemplo un patio interior o un ojo de escalera.

En cuanto a arriesgar para hacer una foto, conscientemente no he hecho nada de forma consciente, pero sí que me pasó en Barcelona que al fotografiar la comisaría de Les Corts, vino un mosso d’esquadra de paisano que me cogió fuertemente por el brazo y me llevó a identificarme en el interior. Otra vez me pasó algo similar fotografiando unos juzgados. Más recientemente en Nueva York estaba en un pasillo del metro y me encontré a un par de policías de frente mientras estaba haciendo una foto y me dijeron que no podía. Salí fuera y esperé hasta que se fueran para volver a entrar y acabar de hacer la foto que tenía en mente.

¿Qué lugares te gusta fotografiar más en Barcelona?

Me gustan los museos, la entrada del Fòrum, los espacios blancos y luminosos. En Barcelona hay variedad de sitios.

¿Cuál crees que es la responsabilidad de un instagramer tan influyente como tú?

Bueno eso de tan influyente lo dices tú [risas]. No creo que sea para tanto. La verdad es que no siento ninguna responsabilidad extra por ser un poco conocido en Instagram. Si he llegado hasta aquí es porque lo que hago me gusta y lo intento hacer lo mejor que sé y con respeto a lo demás, mi intención es intentar seguir mejorando, y ser tal como soy.

Se dice que la fotografía es capaz de mostrar una parte del mundo poco conocida por muchos, ¿qué parte es la que quieres mostrar tú a través de estas imágenes?

Yo me doy por satisfecho si a través de mi fotografía, creo la curiosidad en algunas personas para que se fijen más en la ciudad en que vivimos y que sepan apreciar las fachadas que nos rodean. En definitiva, despertar el interés por la arquitectura en general y apreciar sus valores.

¿Crees que estás inspirando a personas con tu trabajo? ¿De qué forma?

Sin querer ser pretencioso seguramente sí, pero exactamente igual que el trabajo de otras personas me influye a mí. Consciente o inconscientemente, día a día, el buen trabajo de los demás influye también en mi aprendizaje, inspiración y evolución como fotógrafo.

¿Ahora solo te dedicas profesionalmente a la fotografía?

Hace un año me hice trabajador autónomo y eso me permitió coger pequeños encargos de fotografía que tenía y que antes no podía coger porque estaba trabajando en otro lugar y no disponía del tiempo necesario. Pero tampoco he dejado de lado la parte de la arquitectura técnica, porque, de hecho, es a lo que me he dedicado toda mi vida profesional y no lo quiero perder. Realmente, estoy contento porque me han salido muchas oportunidades como fotógrafo, porque era mi hobby y lo he convertido en algo que le puedo sacar provecho.

¿Cuáles son los edificios de Nuñez y Navarro que más te gustan?

Me gusta mucho la recuperación de la fachada en el hotel The Corner. También el Hotel 1898 en Las Ramblas. Toda su historia me parece fascinante.