La casa a punto tras las vacaciones
Llega septiembre y, aunque hay quien todavía acumula algunos días de vacaciones, lo cierto es que, para la gran mayoría, ha llegado el momento de entrar de nuevo en la rutina de un mes en el que todo vuelve a ponerse en marcha: el trabajo, el gimnasio, la escuela y por supuesto, las labores del hogar. Y es que, en nuestros días de descanso, lo más probable es que hayamos estado más tiempo fuera de casa, de modo que las tareas de limpieza y orden se han quedado apartadas o en un absoluto segundo plano. Por eso, ahora es el momento perfecto para hacer un repaso general de toda la casa. Sabemos que la idea no te entusiasma, pero con organización y algunos sencillos trucos podremos volver a poner nuestra casa a punto y prepararla para la llegada de los meses fríos. Y el resultado, bien merece la pena. ¡Toma nota!
Lo primero al regresar: ventila la casa
Es habitual que al marcharnos unos días dejemos completamente cerradas puertas y ventanas, de modo que al regresar podemos notar el ambiente mucho más cargado y denso. Por suerte la solución es muy fácil y rápida: nada más llegar a casa recuerda abrir en seguida persianas, ventanas y puertas para ventilar bien la vivienda. Permitir que se renueve completamente el aire y entre de nuevo la luz del sol en el hogar también ayudará a que nos sintamos mejor y más animados.
¡Deshaz las maletas cuanto antes!
Si quieres evitar acumulaciones de ropa y objetos varios por toda la casa durante días, es importante deshacer las maletas y ordenar todo el equipaje cuanto antes. Lo mejor es ir colocando cada cosa en su lugar a medida que se vaya sacando, preferiblemente el mismo día de tu llegada. Una vez todo esté ordenado de nuevo en su sitio te será más sencillo poner las lavadoras que sean necesarias. Sin duda, tener la casa despejada y las maletas guardadas será un gran aliciente para continuar preparando tu hogar.
Aprovecha y ordena tu armario
El momento de lavar y ordenar la ropa que nos hemos llevado de vacaciones puede ser también, la oportunidad idónea para comenzar a preparar el cambio de armario. Todavía queda mucho tiempo para que llegue el frío, pero podemos aprovechar la ocasión para ir guardando las prendas de verano que sabemos que ya no vamos a usar y empezar a sacar la ropa de entretiempo. Esto nos permitirá hacer una previsión, con tiempo, de las prendas que nos harán falta para la nueva temporada y desechar aquellas que ya no nos sirven o no nos gustan.
Haz la lista de la compra
Lo más probable es que antes de marcharte de vacaciones dejaras tu nevera vacía, de modo que ahora toca volver a llenarla. Aprovecha para planificar una buena compra y, antes de pasar por el super, haz una lista con todos los productos que necesitas, de este modo tu visita será más rápida y efectiva. ¡Ah! Y si tu verano ha estado lleno de excesos recuerda incluir alimentos saludables que te permitan elaborar un menú equilibrado.
Repaso de la limpieza
Antes de marcharnos de vacaciones, es probable que hayamos hecho una limpieza general de la casa para así encontrarla limpia a nuestra vuelta. Si ese es tu caso, ahora lo tienes fácil. Solo tendrás que hacer una revisión para comprobar que todo sigue perfecto y simplemente hacer un repaso de mantenimiento de cada habitación. Pero si antes de marcharte no fuiste tan previsor, ahora toca limpiar a fondo para dejarlo todo listo. Recuerda comenzar con baños y cocina, que suelen ser las zonas de la casa más pesadas de limpiar y así el resto de las tareas como sacar el polvo, barrer, limpiar cristales o fregar el suelo te serán mucho más llevaderas.
Vuelve a cuidar de tus plantas
Seguramente, si tienes plantas en casa, antes de irte de vacaciones le pediste a algún vecino o amigo que te las regara, o quizás les instalaste algún sistema automático de riego. Ahora que has vuelto es el momento de volver a colocarlas en su lugar habitual y dedicarles algunos cuidados y mimos como un regado extra o la limpieza de sus hojas.
¡Dale un nuevo aire a tu casa!
La vuelta de las vacaciones es un momento perfecto para redecorar tu casa y llenarla de energías renovadas. No es necesario realizar una gran transformación, pero seguro que unos cojines nuevos, estrenar sábanas o colocar unas bonitas flores te ayudará a darle un nuevo aire a tu hogar y, sin duda, hará la vuelta mucho más agradable.